El muchacho (con sobrero en la foto) es muy bueno. Valiente, leal, arrojado, listo, hábil... Fuma mucho, pero no afecta a su bondad. Que algo tiene que hacer, criándose, como se crió, en un barrio en el que las putas mejicanas se exhibían en la ventanas. Es muy bueno el muchacho. Que no por bueno tonto, ¿eh?, que se deja perder, pero en los últimos asaltos, y en los primeros lo da todo, el muchacho, hasta los dientes, pero luego se los ponen postizos y no se le nota nada en la sonrisa. Se deja perder porque con el dinero podrá pagar tres años el asilo de su padre. Sino, ¿de qué? ¿Es, o no es bueno, el muchacho? El amigo (sin sombrero en la foto) tiene mucho pa él. Alma atormentada. Bueno, también, menos que su amigo, pero bueno. Y que como tiene el alma atormentada y tiene que tomar no sé qué calmante por las secuelas de su pasado de boxeador, no está en lo que celebra, la pobre alma atormentada. Y se pierde.
sábado, octubre 28, 2006
La vida pública de los fotogramas
El muchacho (con sobrero en la foto) es muy bueno. Valiente, leal, arrojado, listo, hábil... Fuma mucho, pero no afecta a su bondad. Que algo tiene que hacer, criándose, como se crió, en un barrio en el que las putas mejicanas se exhibían en la ventanas. Es muy bueno el muchacho. Que no por bueno tonto, ¿eh?, que se deja perder, pero en los últimos asaltos, y en los primeros lo da todo, el muchacho, hasta los dientes, pero luego se los ponen postizos y no se le nota nada en la sonrisa. Se deja perder porque con el dinero podrá pagar tres años el asilo de su padre. Sino, ¿de qué? ¿Es, o no es bueno, el muchacho? El amigo (sin sombrero en la foto) tiene mucho pa él. Alma atormentada. Bueno, también, menos que su amigo, pero bueno. Y que como tiene el alma atormentada y tiene que tomar no sé qué calmante por las secuelas de su pasado de boxeador, no está en lo que celebra, la pobre alma atormentada. Y se pierde.
miércoles, octubre 25, 2006
lunes, octubre 23, 2006
La vida pública de los titulares
DOS DE CADA TRES NIÑOS ACOSADORES TIENEN PROBLEMAS CON LOS DOCENTES
En un estudio realizado por por la catedrática de Psicología de la Educación de la Universidad Complutense, Mª José Díaz-Aguado a ochocientos alumnos y alumnas de 13 a 17 años de la Comunidad de Madrid, la catedrática relata el siguiente suceso.
La profesora echa a Manuel de clase por su mal comportamiento diciéndole:
-Vete de clase, la clase está mucho mejor sin ti.
Y el muchacho responde:
-También está mejor sin ti.
Y añade esta reflexión:
La base común de todos los chavales que ejercen acoso escolar sobre sus compañeros es que no encuentran su lugar en la escuela. Si a eso añadimos situaciones de riesgo y la contradicción de la propia sociedad, que en ocasiones justifica la violencia (el cachete de un padre a su hijo, por ejemplo), el resultado es el acoso a sus compañeros o sus profesores.
El País, lunes 23 de octubre